
La evolución acelerada de la
tecnología en estos últimos 20 años, nos facilita la vida mediante el uso de gadgets cada vez más
inteligentes, que nos proporcionan información en tan solo una fracción de segundos, sin embargo, esta
revolución tecnológica crea una cotidianidad monótona que a veces crea cierto
tipo de desventajas en nuestras vidas, si no lo podemos controlar con
disciplina y orden.
Una buena administración en
cuanto al uso de los gadgets inteligentes (principalmente la navegación en las
redes sociales), sería tomar unos minutos del día para organizar: que lapso de
tiempo estaremos conectados en el ciberespacio, con nuestra familia, amig@s;
por cierto, ahora en su mayoría, las amistades están relacionadas por medio de
un computador, Smartphone u otro dispositivo, y pocos se relacionan de forma
presencial donde fluye la plática natural y pura, las risas, las ideas de cada
uno de ell@s.
En conclusión:
Tenemos que adecuar nuestro tiempo entre la tecnología y nuestra vida familiar – social.
Esto
de manera responsable y madura.