Spanky, un caballo en miniatura junto a su amigo Dally, demuestran que cuando hay entendimiento mutuo, los resultados son fascinantes. Los dos animales artísticos fueron rescatados por la entrenadora de caballos Francesca Carson y han trabajado juntos desde entonces.
Es increíble la coordinación de los carismáticos amigos, ver a Dally poder mantenerse sobre Spanky, cualquier persona llegaría a pensar que podría perder el equilibrio y caer, sin embargo, el canino está totalmente entrenado al igual que el caballo.
La entrenadora es muy afortunada al tener a su disposición, dos integrantes con mucha química y comprensión, además, la amistad es muy grande entre Spanky y Dally, porque cuando están alejados de su público, comparten momentos muy agradables e inolvidables.